martes, abril 29, 2008

VANS classic slip-on "Off the Wall"

My Skater's Hyperused Classic Slip-On Vans

viernes, abril 25, 2008

Cortado! corto de café, por favor...

No se porqué, pero últimamente, solo escribo para quejarme de cosas. Y, ¡ostia! hay un cosa que día si, día también, me putea soberanamente. Casi le temo a ese momento del día, pero es más fuerte que yo, lo necesito. Y como lo necesito, lo pido: Un cortado! corto de café, por favor... Esta frase la repito a diario un par de veces como mínimo y el resultado, normalmente, me disgusta bastante. Ahora en la uni estoy liado con la Estadística. Podría hacer el ejercicio de comprobar que probabilidad tengo que me sirvan un puto cortado como a mi me gusta. ¡No hay tantas variables! solo se trata de leche y café. Si, hay infinitas combinaciones pero mi intervalo de placer al paladar, no es tan estrecho. Yo solo pido un café con leche, pero en tamaño de cortado. ¿Es eso tan difícil?
Me gustaría que si a alguien, como a mi, le guste el café de esta manera. Por favor, que me diga que le dice al camarero para que se lo sirva bien.
He probado con:
Un cortado corto de café (esta es mi frase estrella) debe tener un 75% de probabilidades que no me lo traigan a mi gusto y lo resisto. Lo jodido es lo que viene después: o me lo tomo a disgusto que pasa mucho porque ya estoy hasta los Peppers o pido que le quiten un poco para que me pongan más leche, cosa que me suele animar a hacer mi novia.
Un café con leche en vaso de cortado (no la uso mucho porque me parece muy ridícula).
Un cortado, 75% leche 25% café (no la uso porque me parece demasiado técnica para un camarero y no quiero que me escupa en el café porque piensa que me burlo de él)
Un cortado, como si fuera un café con leche (no la uso porque tengo miedo que me pregunten: porque no te pides un café con leche directamente).
Un cortado pero al revés, llamado Lágrima (no lo digo porque no se suele entender).
Bueno estos son unos ejemplos os dejo una encuesta aqui a la derecha: ¿que me recomendáis?

martes, abril 22, 2008

El tema de la Tauromaquia

Lo admito, el pasado Domingo 20 Abril, fuí a mí primera corrida de toros. No entiendo mucho del tema, pero se que inspira mucha polémica y quería ver que se cocía, para así formarme una opinión con fundamento; bueno eso y que las entradas me las regalaron, XD.

Aproveché la ocasión para ver, lo que a priori iba a ser, un buen espectáculo ya que en el cartel estaba José Tomás y todo el mundo habla maravillas de él.
La tarde no prometía mucho, la amenaza de tormenta se cernía sobre nuestras cabezas, finalmente llovió, pero no mucho. Cuando conseguí pasar por delante de los antitaurinos pensé que me iban a linchar. Pero nadie se dirigió a mí directamente, creo que todos los gritos iban dirigidos a los viejos engalanados que andaban por allí fumando sus puros. Imagino que no doy el perfil de seguidor de toros así que no me hicieron mucho caso.
Es cierto que impresiona, ver a esa bestia, corriendo con toda su bravura y embistiendo a todo lo que se le pone por en medio. Sin embargo al cabo de poco rato, es fácil darse cuenta de que es una batalla muy injusta. En general reconozco que me aburrí bastante; los toros, según las gentes, no eran muy buenos. A mí ya me lo parecía, se cansaban muy rápido, de todas formas lo pude acabar de deducir, gracias a los gritos de la señora que tenía justo tras de mí, con su garganta pegada a mi oreja. Los toreros tampoco hicieron una buena faena. Al menos, a mí entender: asestar hasta 3 veces un sable a un toro en todo el lomo, más que un arte, es una tortura. No obstante, nadie perdía la esperanza de que alguno lo hiciera a la primera.
Se que sonara enfermizo, pero oír a la señora, gritando: ¡Mátalo!, ¡Mátalo! me hizo sentir sensaciones contradictorias dentro de mí ser. Por un lado, no hubiera dudado en gritar: ¡mátalo!, sacando lo peor que hay en mí. Porque pedir la muerte de un ser vivo, sin duda, no es muy… como decirlo, ¿ético? no lo sé. Al menos me callé y esperé. Por otro lado me sentía un poco partícipe de una carnicería bastante injustificada.
Los gritos que siguieron fueron: ¡Malo!, ¡Malo! Aquí, me fue realmente difícil discernir, a quién iban dirigidos, si al toro o al torero.
Sin duda alguna, lo que más me sorprendió, fueron sus últimos gritos. Cuando la señora, al ver al toro a un suspiro de la muerte, gritaba: ¡pobrecito! con pena.
A ver señora, según mi lógica, si pides sangre y que lo maten y tal. Y finalmente, se lo cargan, te alegras ¿no? Puedes decir: ¡ahí tamos! o ¡torero! o algo así. Lo que no tiene sentido es decir: ¡ay!, pobre animal. ¡Coño! si lo querías matar hace dos segundos.
Ésta dualidad en las personas, es lo que me asusta de la gente y de mí mismo. Ésta incoherencia innata a nuestro ser, es fácil que se apodere de uno. Simplemente, dejándote llevar y siendo primario, ya aflora. Por suerte para mí, creo que tengo algo que no se muy bien lo que es: si conciencia o alma o sentido común, que me dice que observe y después tome decisiones, siempre intentando encontrar un equilibrio, aún a sabiendas, de que se presume imposible.
Espero que la señora haga algo parecido, porque sino, me da miedo el tipo de descendencia que pueda tener y además, seguro que en los colegios electorales la dejan votar, porque aparentaba normalidad. Y yo, lo sé. Se que esta completamente loca.
Pensándolo en profundidad y sobretodo queriendo comprender. He llegado a esta conclusión:
Para que una corrida se pueda considerar arte, debe cumplir como mínimo los siguientes requisitos:
Hay que acercarse mucho al toro.
Hay que dominar al toro.
Hay que lidiar con empaque, con determinación y sin manifestar miedo.
Hay que ejecutar todos los rituales protocolarios al pie de la letra.
Y sobretodo no hay que torturar al animal. Al darle la estocada final hay que dejarlo en el sitio, sin que sufra.

sábado, abril 19, 2008

Odio el IKEA: trabajar in situ para consumir ipso facto en un Fast Food de muebles


Lo lógico es pensar: este tío se ha ido al Ikea y después de una mala experiencia, se quiere desahogar contándolo en su blog. Personalmente nunca he tenido ningún problema con el Ikea, pero mi frustración al comprar allí fue tan grande que dije pá mis adentros; ésta te la guardo. Y pam! Aquí estoy, expresando mi indignación por su filosofía.
Pensaba que el señor Ikea sería alguien como el atontao de Theo Jansen, ése que juega a mover maderitas con el viento en la playa. Es el candidato perfecto su nombre suena a sueco y además usa mucha madera.

Nada más lejos de la realidad: el señor Ikea es un granjero que pasaba sus días de juventud vendiendo cerillas en la puerta de su granja Elmtaryd. Quién iba a decir que años después se convertiría en el súper señor IKEA, fundador de la mayor empresa de muebles a nivel mundial. Y todo gracias a una sencilla pero lucrativa idea. El 3X1: tú curras por tres y él a cambio te rebaja uno. Dicho de otra manera, tú trabajas por 3 personas y él a cambio, te vende los muebles un poco más baratos que en una tienda normal. El trato es clarísimamente injusto, pero a la peña le mola currar. Me explicaré: tu eres un "typical customer" que quiere comprarse un armario. Sin embargo cuando atraviesas la puerta de Ikea, te transformas en un pluriempleado. Así de fácil.

Primera profesión: Mozo de Almacén: te coges y apuntas la referencia de dicho armario, te vas al almacén, ése que es en plan industrial, y de entre todo lo que hay allí, coges tu material y lo pagas. El señor Ikea esta planteándose la idea de poner al lado de los lápices y papeles un toro de carga para acceder más fácil a los pales.
Segunda profesión: Transportista: Una vez has pagado, te llevas las cosas pa tu casa, a tu cuenta y riesgo; y si no te cabe en el coche, pues nada, a dar viajes.
Tercera profesión: Aprendiz de Ebanista: porque si no sabes, aprendes! El tema de las instrucciones no lo voy a tocar porque comprendería una entrada a parte y paqué! Montar un mueble puede llegar a ser tan difícil como hacer un puzzle de 50.000 piezas del revés y como intentar fugarte de Fox River al mismo tiempo. Si tienes paciencia cuando llegas a las 10 prácticas te hacen cliente vip y puedes desarrollar el 4x1 con una cuarta profesión: sería el equivalente al Bonus, la Extra Stage o el Final Boss. Es en este punto cuando el señor Ikea te asciende de rango y pasas a ser también Carpintero; para que no solo cojas el armario del almacén lo lleves a casa y te lo montes, sino que también te lo confecciones poniendo tu arte en cada una de las piezas, así como reunirte con el propio granjero para decidir su diseño. Qué más se puede pedir, ya te lo dejan hacer todo!

Lo que pasa es que el señor Ikea es muy listo, la gente solo ve que es más barato y el tío claro que lo pone barato! lo que tendría que dártelo a cambio de tu trabajo, porque, no se, pero a mi me parece que ir a comprar para acabar trabajando es heavy. Si ya me da palo ir a trabajar para comprar, solo falta que te hagan trabajar donde compras. Aunque visto así, casi es mejor. Total, en la sociedad en la que vivimos, que se basa en consumir y consumir; pues porque no trabajar in situ lo justo y necesario para consumir ipso facto.

jueves, abril 17, 2008

Roma con Pizza, Pasta y Focaccia

¡¡Ya estoy en casa!! El viajecito se las ha traído. Ha sido un viaje complicado ya que 18 personas que de alguna manera se interrelacionan entre si da para mucho juego. Rencillas del pasado se juntan con rencillas del presente y se preparan las bases de las rencillas del futuro; por que no decirlo hubo rencillas en el viaje. Sin embargo, no me llego a salpicar mucho, ya que el ojo del huracán estaba situado lejos de mí y por consiguiente a mi zona solo llegaron pequeñas ondanadas de ostias.
Como ya estuve en Roma he decidido poner unas fotos del antes y unas del después a ver que ha cambiado.

Antes y Después:






























































lunes, abril 14, 2008

Roma, la ciudad de la Dolce Vita

Roma, siempre me ha gustado Roma pero desde el principio sabía que este viaje no iba a ser como el resto: esta vez iba con los padres de ella, ellos y su familia... Esta vez no iba a controlar nada en absoluto y me tendría que dejar llevar, para bien o para mal, por las decisiones de las personas que me invitaban. Así que me encontré con una cara de tonto como la del colega este del Martini.

El despegue: estando aún en casa me encontré con la maleta en la puerta y con la mitad de mis cosas encima de la cama, ¡su madre ya la había recogido! Pillándolas de cualquier manera conseguí bajarlas hasta el taxi. No sabía muy bien por qué, pero el caso es que teníamos que llegar al aeropuerto dos horas antes del despegue. Siempre he pensado que las prisas no son buenas amigas y hacerme bajar corriendo y con el café en los mofletes… después lo comprendí todo. Ya en la terminal, ¡que grata sorpresa! Su hermana tenía el DNI caducado, retrasando el embarque y más prisas dirección a la comisaría del aeropuerto para que le hicieran un resguardo. Indudablemente esto justificó en parte las dos horas de adelanto. Superado esto era el turno de su hermano: a éste se le olvidó el portátil en el arco de seguridad de la policía, acabó por justificar las prisas que nos dimos por llegar.

viernes, abril 11, 2008

There is a Simple Plan in Barcelona

Buah! que guapo fue el concierto de Simple Plan. Fue el Miércoles pasado día 9 de Abril en la sala Razzmatazz. Como era de esperar el concierto me encanto, quiza demasiado niñata pero es lo que hay. Una sala como esa se le queda pequeña para este espectacular grupo canadiense. Canciones como Shut Up, Jump, Welcome to My Life, Take My Hand entre otras sonaron genial, mención especial para Untitled aqui os dejo el video:




miércoles, abril 09, 2008

Último día de clase

Espero que estas clases os hayan motivado para seguir aprendiendo temas relacionados con el mundo de Internet.

lunes, abril 07, 2008

El día de los pañuelos

Él pensaba que en su templo este día jamás llegaría pero finalmente ese día llego y los pañuelos se apoderaron de su gestión. Ahora ya no se puede culpar a Ronaldinho ni a los jugadores, ni tan siquiera al técnico. Ahora la culpa es tuya y ¿que vas a hacer? Llamar a Cruyff, llorar para que vuelva Rosell? ¡Haz algo o vete ya!